Día 3. 27.07.2015
Lara - Zulia
6:00 am TROPA a calentar los motores y levantar este campamento. Esto implica dejar todo tal cual lo encontramos. Rápidamente se desayunan y organizados por patrullas comienza la limpieza de baños y pasillos, cargan el autobús para dejar atrás la hermosa casa-hacienda.
Nuestro agradecimiento a la familia Smith y en especial a Eduardo Lacruz. Una hoja de té para él. Ya te extrañamos.
El camino continúa. Vamos de salida de la capital musical de Venezuela y nuestros chicos han armado tremendo trabuco, cargados de sombreros, tambores, charrasca, cuatros y al son de sus ocurrencias las chicas cantan y ellos tocan en una calle de Tintorero, los miedos escénicos se quedaron en Caracas.
Na´Guaraaa
Carora es el lugar de nuestro almuerzo, ya se comienza a sentir el sol de por estos lados.
Después de ver dos películas en el súper bus, justo a las 6.23 pm, con espectacular atardecer, entramos a Maracaibo, la ciudad del sol amada. Este atardecer fue un gran regalo de bienvenida que nos preparó San Ignacio.
SENTIR ZULIANO
Cuando voy a Maracaibo
y empiezo a pasar el puente,
siento una emoción tan grande
que se me nubla la mente,
siento un nudo en la garganta
y el corazón se me salta,
y sin darme cuenta tiemblo
y sin querer estoy Llorando.
La Chinita y Papá Dios
andan por el Saladillo,
paseando bajo su sol
que les da todo su brillo.
Es la tierra del Zuliano
un paraíso pequeño,
donde todos son hermanos,
desde el guajiro al costeño.
Yo no soy regionalista
pero a mi Zulia lo quiero,
porque sé que es el primero
de Venezuela en la lista.
Ya entrando al colegio Gonzaga los niños avistan al Padre Galdos, muy emocionados por la sorpresa se atrevieron a preguntarle si era él o su morocho.
La noche transcurre entre la cena, reflexión, pitos y linternas y bitácora del día.
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