Muy temprano al calor maracucho, realizamos la calistenia al compás de Shakira (ahora SI sudamos, ¡que molleja e´ calor!) Desayunamos croissants y gochipan.
Formación de Bandera para partir a la visita de la planta modelo Polar, permitió un aprendizaje completo sobre el proceso de la producción de maltín y cerveza ¿Quién ha probado una malta?, el olor invitaba a tomar…. Nos ofrecieron, además jugos, empanaditas, pastelitos, tequeños y mandocas (gustosísimas). Para el almuerzo no pudimos resistirnos a nuestro sabor criollo unos deliciosos patacones en Chops, luego llegó el momento de una afectiva despedida a Susy (gracias por tus consejos, siempre acertados).
Seguidamente a la Basílica Nuestra Señora de la Chiquinquirá "La Chinita", que elegancia con sus tres naves, dos torres, el altar mayor, el presbiterio y números nichos. Su Virgen de rostro dulce, piel morena, ojos achinados cargando entre sus brazos a un hermoso niño. Maravilloso momento ver a nuestros celistas engrandeciendo su espíritu. Cruzamos y llegamos al Paseo de la Chinita (realizada a principios de este siglo), posee numerosas fuentes, arreglos florales y esta coronada por una escultura la Virgen María de ocho metros y siete metros de base, está rodeada de ángeles y querubines.
Nos trasladamos a la Vereda del Lago, con una larga caminería que colinda con el Lago de Maracaibo y desde el cual es posible apreciar en la lejanía el Puente Rafael Urdaneta, nos acompañó una brisa fresca y el sonido del oleaje de nuestro lago.
Regresamos al colegio Gonzaga, una muy merecida mojadura, pasamos cenar hamburguesas y que sorpresa tan agradable, la familia Grieco, nos obsequiaron Donas, para todos los gustos, la boca se nos hizo agua.
Finalizó la jornada con una actividad de mística, nuestra reflexión y a dormir. Un fructuoso día!!!
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